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jueves, 30 de septiembre de 2010

9-LIBRE (corazones en conflicto)

Era extraño sentirse tan viva, tan entera, calida y feliz, el aire fresco del verano en el campo invadía mis sentidos limpiando mi alma, ya habían pasado las fiestas de fin de año y mi pequeño grupo familiar comenzaba a planear su regreso a la ciudad con excepción de Raúl, el hijo del capataz que entraba a la universidad en la misma fecha mía , mi padre y mejor amiga ya preparaban su regreso, pero algo me inquietaba mientras nos dirigíamos a la pensión donde vivía durante las clases, ¿ que pasaba con el novio de mi amiga? Y ¿Por qué se comportaba tan extraño?, le había llamada hace tres días, que estaba de vuelta y necesitaba que volviese a la ciudad urgente, óseaaa, este hombre sabia que eran 8 horas a la ciudad del pueblo mas cercano a casa de mi abuela y que quedaba a dos horas de este, para que pudiera abordar el bus, en auto era menos, pero se negaba a esperar a mi padre unos días mas y en parte a eso veníamos, a arreglar unas cosas a la pensión y pasar el día juntas y cuando hubiese llegado la medianoche la dejaríamos en el trasporte a su destino.

Sabia que no podía emitir juicios y mucho menos lanzarle mis sospechas, estaba sufriendo, era obvio, tomando en cuenta que de las 3 semanas que estuvo conmigo la llamo dos veces.

Una para decirle que no llegaba.

La segunda que ya estaba y la esperaba.

Quería estar con ella, consolarla si algo no salía bien, pero comprendía que no podía regresar a casa, bueno, mejor dicho a casa de mi madre, no ahora, tomando en cuenta que la boda era en 6 semanas mas.

Los veía reír mientras nos aparcábamos al costado de la casona que estaba tan vacía, tan sola, mis ventanas abiertas… no recordaba haberlas dejado así, pero últimamente no recordaba muchas cosas de esa época triste.

Una sensación que si reconocí me sorprendió, un calor en el vientre subió por mi pecho hasta mi boca en forma de mariposas, me dejo pegada al asiento, luvi y Raúl me miraron raro desde fuera, les sonreí y me arme de valor, si, mi cuerpo le extrañaba, no sabia nada de el desde esa mañana, pero todo me lo recordaba, y mi ser completo le pedía.

Respire profundo y entramos a la pensión llevando las cosas que necesitaría y riendo, que fácil me resultaba sonreír y que felices habían sido estas vacaciones, estuvimos todo lo que nos quedaba de mañana y pasado la hora del almuerzo, terminamos cansados y con hambre, la pieza por lo menos lucia mejor con la mano de pintura y sin la cantidad de trabajos que apilaba en los estantes, acomodamos las nuevas repisas y la ropa de cama que traíamos, todo estaba listo o casi listo, así que comenzamos a sacar lo que me llevaría y dejarlo en el auto, los chicos bajaron, yo debía cerrar y despedirme de la dueña, la casa se sentía muy silenciosa sin esa bulla juvenil de los días de clases.

Salí rápido pero antes me detuve en las escaleras que daban a la buhardilla, ese era el depto. De Esteban mi joven profesor de literatura y donde se había hospedado mi desconocido cuando le conocí.

Mi corazón dio un brinco que me estremeció. Nuevamente respire y salí corriendo, me encontré con la parejita otra vez riendo y tonteando, mas encima apurándome , aun nos quedaba parte de la tarde para despedir a mi amiga, así que partimos.

A mitad de cuadra dude, no recordaba haber dejado con llave y la ventana estaba abierta todavía, luvi me aseguro que la había cerrado, así que baje de un salto mientras Raúl se estacionaba en medio de quejas y bromas.

Llegue hasta el segundo piso exhausta de tanto correr, estaba abierto de par en par, la electricidad recorría mi cuerpo ahora mucho mas violenta que antes y seguramente se debía a esto que estaba actuando tan olvidadiza. Al traspasar la entrada mi sorpresa fue un golpe en seco que me dejo pegada en el umbral de esta.

Parado en un costado de la ventana mirando hacia la calle y sosteniendo unas ropas mías entre sus manos…………… mi desconocido favorito, trague aire con dificultad y me quede con el, atrapado en la garganta sin siquiera poder respirar ni decir nada.

Alejo mi prenda de su rostro con los ojos cerrados, giro un poco la cara y los abrió, su mirar era un abismo que se mezclaban la confusión, la tristeza y la pasión desmedida en la que yo me dejaba perder, poco a poco levanto su mirar del suelo hasta llegar a mis ojos. Caí rendida en su abismo particular.

_Hola. _su vos era ronca_

_Hola. _logre decir en susurros_

_Estaba abierto y creí que ya te habías marchado._tomo mi prenda y la tiro a los pies de la cama, cruzando sus brazos en su pecho, mientras se apoyaba en el marco de la ventana, lejos de la vista de los transeúntes._

_Pensé que te habías ido…….que no te volvería a ver.

_Estaba camino…….al otro lado del mundo y te prometo que no iba a regresar……pero……_comenzó asonar la bocina y los gritos risueños de mis amigos apresurándome._

_Debo irme._en eso ya lo tenía frente a mi._

_Lo se._me tomo con fuerza en sus brazos llevándome al interior de la habitación cerrando la puerta detrás de el._

Era como le recordé durante millones de veces en estas semanas, mi ser ardía a su tacto, mi boca se trababa en sus besos, sus manos reconociendo con confianza los pliegues de mi cuerpo, las mías avariciosas lo recorrían con urgencia, desesperación y angustia, se sentó en mi cama y a mi sobre el, subió mi falda, abrió mi blusa de un tiron y en ese mismo momento con los gritos de mis amigos providentes del exterior me hizo el amor.

Como negarme, como rechazarle, si despertaba en las noches ardiendo de deseo por su ausencia, me perdí a mi misma en el placer, en su placer, terminamos tirados exasaustos sobre la cama, atados el uno con el otro sin poder dejar de acariciarnos y besarnos.

_Me llamo André……………. tus eres Camila, la muchacha triste…. _decía en medio de susurros sin aliento._

_¿Que…..?_Lo mire asombrada,_¿Qué era esto?_

_Le pregunte a Esteban, incluso me dio tu dirección para llegar hasta ti, de hecho estaba casi convencido de ir hasta casa de tu abuela, pero tengo que estar en otro lugar pronto._miro con melancolía hacia la ventana._luvitza me amenazaba con subir a buscarme._

- Creí que no podíamos estar juntos………

-Que no pudiera en esos momentos no significa que no quiera ahora.

-me tengo que ir……

-Lo se…….._Me tomo de la mano._Espérame, ¿por favor?, pronto voy a estar de vuelta, por favor…..

_¡¡¡¡¡¡No lo seeee!!!!!!!!_ Casi le chille mientras me levantaba y arreglaba mis ropas, luvitza venia en camino al segundo piso._por favor………. por favor………_Me susurraba dolorosamente mientras me aferraba a su abrazo, mi respirar se tornaba un jadeo del demonio, era desesperante como le deseaba, luvitza ya estaba en las escaleras gritándome que saliera, estaba molesta, nos quedaba muy poco tiempo juntas._

_Me tengo que ir._me queje_……………. por favor déjame,……. ¡¡¡¡¡¡¡no lo se!!!!!!!........... Solo déjame por favor._me tomo con fuerza y me beso como si el mundo se acabara al otro día, luego me soltó, me alejo de su cuerpo, respiro profundo apretando la mandíbula y me saco del cuarto, tomo mis llaves._

_ Esteban las tendrá, yo cerrare y…………. es mejor si nadie se entera de esto aun.

_Y cerró la puerta._

Aura.

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